Los peces autóctonos de Cuba. La Limia vittata

Resulta lamentable, el hecho, de que mayoritariamente, los cubanos manifiesten su indiferencia y/o menosprecio por las especies autóctonas de peces. Esa expresión tan común de ¡son guajacones!, sinónimo de ¡no tienen importancia! es incorrecta, injusta y perjudicial. Contrario a esa realidad, nuestros “guajacones” son especies valiosas para la estabilidad de los ecosistemas dulceacuícolas, naturales y artificiales; exponentes de nuestro patrimonio natural y aleados de nuestra salud, por solo citar algunos ejemplos.

En la mayor de Las Antillas, tenemos la Limia vittata, especie autóctona y conocida internacionalmente como: “Limia Cubana”, “Limia Anillada” o “Molly Cubana”, entre otros nombres comunes. Es un endémico cubano, con amplia distribución en Cuba e Isla de la Juventud. Existen reportes de una población introducida en Hawai.

Pueden habitar en arroyos, ríos, lagunas, embalses, canales, presas y otros depósitos de agua dulce, pero, además de la amplia gama de acuíferos nombrados, puede encontrarse en reservorios salobres o semisalobres como manglares, estuarios y lagunas costeras.

En las aguas salobres de la zona costera, las hemos encontrado conviviendo con otras especies como: Gambusia puncticulata, Cyprinodon variegatus, Dormitator maculatus y Fundulus grandis, mientras que, en acuíferos de agua dulce del interior de la Isla, se añaden otros cohabitantes: Gambusia punctata, Giraldinus metallicus, Giraldinus falcatus, Cubanichthys cubensis y juveniles de Nandopsis tetracanthus y Oreochromis sp.

Limia, es uno, de las cuarenta decenas de géneros que integran la familia Poeciliidae, palabra derivada del latín “limus” que en castellano enuncia “barro”, haciendo alusión a las especies limívoras, consumidoras de detritos, aunque también ingieren organismos vivos como larvas de insectos y cuenta con una veintena de especies.

El específico vittata, proviene del latín y representa “rayado” o “con bandas”.

Muestra un cuerpo alto y robusto, lateralmente comprimido. La boca es pequeña, terminal y la mandíbula inferior con una leve proyección. De coloración base pardo-olivácea y vientre blanquecino. Según la descripción general de la especie, en las hembras deben aparecer puntos negros en los costados, debido a los bordes de sus escamas, pero, se han colectado diversas variantes de la especie, algunos ejemplares con grandes manchas negras de colocación variable y caprichosa, aprovechadas en la acuariofilia para la obtención de peces más atractivos destinados a la tenencia en acuarios.  

 Todas las aletas son traslúcidas y algunas levemente punteadas. Las hembras exhiben una mancha amarilla o naranja en la región anal.

En los machos pueden ser apreciadas unas líneas verticales, irregulares, más oscuras y las aletas son de un matiz amarillo-naranja con nítidos puntos negros, en el caso de las ventrales, agrandadas y modificadas. Su gonopodio es corto, de punta recta y sin gancho.

Las hembras pueden crecer hasta los diez centímetros de longitud total y, a veces, un poco más, mientras que los machos siempre son más pequeños, entre cinco y seis centímetros.

La expectativa de vida de estos peces, en condiciones idóneas, está entre tres y cinco años.

Son ovovivíparos y muy prolíferos, fáciles de reproducir en cautiverio. Alcanzan la madurez sexual a partir de los cinco a seis meses y el período de gestación oscila entre los treinta y los cuarenta días.

Pueden alumbrar varias decenas de crías y las hembras adultas hasta cien descendientes cada treinta o cuarenta y cinco días, como promedio.

 

Ficha básica de Limia vittata
Grado de dificultad	Baja.
Tipo de Agua	pH 7,5 a 8 y una dureza gH superior a 20
Temperatura	Entre 18 a 24ºC
Iluminación	Media-Alta.
Alimentación	Omnívoros.
Necesidades básicas	Agua limpia con poca corriente, bien oxigenada. Acuario plantado.
Comportamiento	Pacíficos.
Zona en el acuario	Fondo-Media-Alta.
Tipo de reproducción	Ovovivípara.

 

Los ejemplares expuestos, salvo las crías, nacidas en cautiverio, proceden de la cuenca baja del “Arroyo Batey del Medio”, conocida como “La Chorrera” en la localidad de Centeno, municipio Yaguajay, al norte de la provincia de Sancti Spíritus; han sido colectados con la colaboración del estudiante de secundaria básica Yasiel López López.

 

Artículos relacionados publicados en esta página que puede consultar

 “Los peces autóctonos de Cuba. La Gambusia puncticulata”.  Publicado el 7 de septiembre de 2021.

“Los peces autóctonos de Cuba. La Gambusia punctata”.  Publicado el 8 de noviembre de 2021.

“Los peces autóctonos de Cuba. El Giraldinus metallicus”.  Publicado el 13 de diciembre de 2021.

 “Los peces autóctonos de Cuba. Giraldinus falcatus. El “Guajacón Dorado”.  Publicado el 12 de enero de 2022.

“La familia Cichlidae. Nandopsis tetracanthus, nuestra «Biajaca Criolla» y Nandopsis ramsdeni, el «Joturo»”. Publicado el 12 de abril de 2022

 

Principales fuentes consultadas

www.aquariumwereld.be

https://biogeodb.stri.si.edu

www.britishlivebearerassociation.co.uk

www.discoverlife.org

https://diszhal.info

www.fishbase.se

https://nas.er.usgs.gov

www.tfhmagazine.com

Ponce de León García, José Luis y Rodet Rodríguez Silva. 2010. “Peces cubanos de la familia Poeciliidae. Guía de campo”. Editorial Academia. La Habana.